Esta semana he podido ver “The reader” (El lector), la película por la cual Kate Winslet, ha ganado varios premios entre ellos el Bafta y el Oscar. Tengo que confesar que Kate es una de mis actrices favoritas desde hace muchísimos años. Yo la descubrí en la película “Criaturas Celestiales”de Peter Jackson y desde ese momento la he seguido en casi todos sus trabajos. Es una actriz que siempre me ha hecho creíble todos sus papeles y siempre he disfrutado de sus interpretaciones. Así que de entrada comence a ver “The reader” con la alegría de ver una actuación de Kate.
La película esta basada en el libro “The reader” escrito por Bernhard Schlink, cuenta la historia de Michael Berg y su extraña relación con Hanna Schmitz. La película comienza presentándonos a un Michael Berg maduro interpretado por Ralph Fiennes, otro maravilloso actor inglés que me tiene robado el corazón, mirando a través de la ventana, aunque su mente está ausente y en otra parte, comienza a recordar su juventud en la Alemania de después de la II Guerra Mundial. Esto hará que nos traslademos al momento y veamos un Michael con 15 años e interpretado por un espléndido David Kross que va camino a su casa desde el colegio. Michael se pone enfermo y le ayudara una mujer, Hanna Schmitz, revisora de tranvía, atractiva, solitaria y enigmática.
Cuando pasados unos días le lleva unas flores para agradecer su atención, comienza un juego de seducción por parte de ella. Comienza una larga relación clandestina, donde ninguno de los dos parece detenerse demasiado en considerar la diferencia de edad que media entre ambos -él tiene 15 años, ella 36-, Michael se siente fascinado tanto por la mujer, mucho mayor que él, como por el sexo, el cual llega a convertirse en objeto de un curioso intercambio; a cambio de conseguirlo, Michael debe leer libros a Hanna. los encuentros sexuales parecen convertirse en razón principalísima para levantarse cada mañana, aunque en ocasiones discutan, pues ella exhibe un extraño carácter con inesperados cambios de humor, y nunca habla mucho de sí misma. Hasta que un día Hanna desaparece inesperadamente.
Ocho años después, Michael, convertido en un joven estudiante de derecho, vuelve a encontrarse con Hanna mientras está como observador en un tribunal donde se está juzgando a colaboradores del nazismo. Hanna está acusada de un horrible crimen y rechaza defenderse a sí misma. Michael se da cuenta entonces de que el amor de su juventud guarda un secreto que considera aún más vergonzoso que el asesinato. Michael intentara comprender, por encima de otra cosa, quién era, y es, esa Hanna de la que se había enamorado. Quién es, porqué actuaba así y porqué desapareció. Poco a poco, las sombras se irán desvaneciendo y estará en sus manos, tras una tardía revelación, la posibilidad de salvar o condenar a la que fue su amada.
Al igual que en ‘Las horas’, la anterior y brillante película de Stephen Daldry, la acción no se nos muestra de forma lineal, sino que da saltos en el tiempo, ofreciéndonos los acontecimientos del pasado y el presente, ese movimiento que a mi me encanta particularmente tal vez debido al efecto del Sr. Orson Welles en mi vida y que Daldry sabe hacer magistralmente, para darnos esa sensación de que para Michael el ayer sigue ahí, latente, influyendo en lo que ocurre ahora. Los secretos de Michael le devuelven constantemente a un pasado que se niega a aceptar, pero del que no puede escapar. La secreta relación con Hanna afectara durante toda su vida a Michael al igual a todos los que le rodean.
No olvidare en mucho tiempo esta película, es de aquellas que te dejan huella, de las que cuando acabas de verla sigues pensando durante un tiempo, de las que te dan ese gustazo de haber saboreado un gran historia. Espero que disfrutéis igual que yo de esta gran película con una brillante dirección y un impresionante reparto el cual aporta realismo e intensidad a toda la historia. Descubriréis los secretos Michael y Hanna, que han dejado huellas en sus vidas. Secretos que como ellos me guardo y no diré. Secretos que os harán “pensar”… palabra realmente MARAVILLOSA en el buen cine.